Pero si eres capaz apartar los egos, leer entre líneas y aguantar las arcadas, quizas llegues a la conclusión, de que gracias a esas diferencias entre los puntos de vista, con esas insistencias en defender lo indefendible, nos han regalado a los demás una clase magistral con todo lujo de detalles.
Es la magia que al final hace grande a los foros, sin los unos, no existirían los otros.