¿Renunciar a los Smart TV? No lo creo posible. Han traído cosas irrenunciables, como la conectividad con otros dispositivos, el DLNA, el HbbTV, el acceso a Internet, etc. Su punto flaco sigue siendo la aplicaciones, por no haber una plataforma común, tipo Android. Así que lo que habrá que hacer en la próxima compra, si interesa el tema de las aplicaciones, es irse a la única marca que, por ahora, parece tomárselo en serio.

Lo de que las marcas dejen abandonados tan pronto módelos de años anteriores, no siempre es así. En el verano de 2012 me fue fácil decidirme por LG, ya que, sobre el papel, superaba en todo a la Samsung del mismo precio que también me gustaba: doble de herzios, más conectores HDMI y USB, entrada VGA (una de mis prioridades), mejor ángulo de visión, sintonizador satélite; y en aplicaciones andaban igualadas: de las que me interesaban solo faltaba Yomvi y se acaba de anunciar el acuerdo entre LG y Canal+. Así que, repito, la decisión fue fácil. Hoy, año y medio después, aquel modelo de Samsung disfruta de todas las nuevas aplicaciones que ha incorporado la marca; mientras que las LG del mismo año están ya totalmente abandonadas.