Una de las marcas responsables, si no la que más, de que el LCD no haya evolucionado es samsung presentando pantallas de bajo costo, piensese en la iluminación desde los bordes, con un cuidado diseño y un marketing agresivo que ha dominado el mercado. Lleva años haciéndo cambios cosméticos en sus paneles, estrategia que le ha reportado cuantiosos beneficios, pero que ha estancado el progreso de esta tecnología.

En este momento, una vez saturado el mercado del LCD de bajo costo y pobre rendimiento (incluyase aquí modelos de alta gama como el HU8500 que con sus despreciables niveles de negro y corto ángulo de visualización, además de los incovenientes que todos conocemos, uno de los peores el clouding, jamás convencerá a un aficionado al cine), se hace del todo necesaria una evolución.

LG está demostrando que se puede hacer con otras tecnologías, en su caso el WOLED, pero debemos estar atentos a innovaciones que pronto se van a presentar y que de seguro van a revolucionar el mercado de las televisiones, sobre todo en el segmento de la calidad. Unos meses de espera y lo veremos en el CES.