Es una lástima que las matemáticas, o los matemáticos, vayan más allá de donde pueden llegar. Aplicar modelos matemáticos en campos como la bioquímica y la biología molecular, o en la ecología (que mira que se utilizan depredador-presa y demás) es algo mucho más limitado y menos efectivo de lo que a algunos les gustaría reconocer.

En estos campos nunca tenemos sobre la mesa todas las variables. No quiero decir nada en el de la genética. Desconocemos algunas variables tanto cualitativa como cuantitativamente y esto se da incluso en los ensayos de laboratorio. Un caso mendeliano de cruce de homocigotos AA con aa y dominacia de A y con la consecuente generación al 100% con rasgos de A (descendientes en un 100% Aa), no se suelen dar.

Nunca tenemos la certeza de un 100% de variables contratadas.
Nunca tenemos la certeza de un 100% de ensayo controlado (no sólo por lo anterior, sino por ejemplo por pureza de reactivos o por comportamiento de muestras biológicas, por no decir nada de lo que supone el manejo de algo que no se ve y que se observa, analiza y valora por indicios o indicadores indirectos).

En consecuencia... nunca nos movemos con verdades absolutas en estos campos (que son los que conozco), no es necesario un teorema o enunciado matemático para darse cuenta. Pero es que incluso la observación de la realidad y la aceptación de la evidencia que comentas se tiene que hacer con muchísimas reservas.

El testeo de los medicamentos en voluntarios y la larga serie de pruebas y años utilizados antes de su lanzamiento es un ejemplo muy claro de la "inseguridad segura" de la ciencia en el campo en el que nos movemos. Y es que, si algo significa la biología es diversidad, incertidumbre y cautela en la observación, porque simplemente las herramientas de observación no llegan en muchísimos casos a lo que se necesita observar. No digo sólo in vitro, sino y especialmente in vivo, que es donde interesa de verdad.

Saludos