Después de un tiempo prudencial, comentaría que no va tan extremadamente fluida como llegó a ir con las últimas versiones de 8/Oreo. Cuando la compré nueva jamás llegué a pensar que alcanzaría esos niveles de fluidez con el SOC que lleva, pero Sony se la sacó en este aspecto.

Ahora alguna cosa como la barra de volumen vuelve a ser perezosa a la hora de saltar y de sincronizarse con el HT, pero no pasa a mayores y sigue yendo mucho mejor que con Android 6, 7 y las primeras versiones del 8.

Sólo espero que Sony se porte tan bien como con la versión 8 y termine de pulirla, porque la había dejado de escándalo contra todo pronóstico.

Si no fuera por la inconsistencia de la retroiluminación en los bordes, tele redonda.