Desde luego. Todo lo contrario que la transparencia del señor Casado con sus trabajos de master.

En este tema, me parece que ambas partes hacen un ejercicio de cinismo, y sectarismo. El señor Sánchez ha pasado del "no es no", a flotar sobre la tarima, pidiendo el sentido de Estado, que él no tuvo. Mientras que el señor Casado (y, hasta cierto punto, también el señor Rivera), han pasado de poner de vuelta y media al PSOE por no anteponer los intereses de España a los intereses de partido, a practicar ellos la misma doctrina.

El más coherente, ha sido el señor Rajoy.

Ahora bien, resulta divertido que en este cambio de posiciones, en un lado sea "pragmatismo", y en el otro "marxismo y falta de principios".