Hola Cañoncito.
Es la segunda vez que intentas deslizar (sin éxito) los siguientes conceptos:
-1: la crítica a determinados políticos de izquierda (Iglesias, Rufián y compañía) se realiza únicamente por "la objetiva sensación de guarretes".
Llamar "coletas" a alguien que lleva efectivamente su pelo recogido en una coleta, no causa ningun revuelo a nadie.
A Pablo Iglesias en este foro se le ha calificado como "pijo sin clase", "acomplejado resentido que busca revanchismo y venganza por vete tú a saber que imaginarios agravios fueron sometidos en su niñez", que "tiene patologías que precisarían tratamiento y terapia profesional y no precisamente estar en congreso","capo mafioso", "psicópata peligroso", "nostálgico de las checas y los gulags", entre otras muchas perlas más. Todas estas barbaridades, llevaban indefectiblemente tu like asociado, y alguna de ellas directamente la has posteado tú (la primera que cito).
Si la crítica a determinados personajes políticos se hiciera en base a criterios objetivos de higiene, coincidirías conmigo que es mejor recoger un cabello sano en una coleta que fijar al cráneo los cuatro pelos de rata que le quedan a Jorge Fernández Díaz con una mezcla homogénea de babas secas y grasa corporal.
Si la valía de un político se mide por lo bien que le queda el traje (con corbata, por supuesto), deberias estar enamorado de la percha que tiene nuestro presidente del gobierno, y todos sabemos que no es el caso
.
Así pues, queda claro que tu argumento nunca ha sido válido, por mucho que intentes disimular echando balones fuera.
No se trata de "objetivas" críticas a la higiene, al decoro, a la moda, a la "clase", a la hipocresía, o a la falsedad.
Se trata de apoyar a los hooligans de tu equipo, sin ningun respeto.
De hecho, el Capitán Trueno ya dió el salto de insultar a los políticos integrantes de la coalición de gobierno, para pasar a clasificar directamente a sus votantes en las categorias de "tonto", "insensato", "cómplice repugnante", "masoquista o gilipollas sin solución".
Viste tú algun revuelo por estas barbaridades? Yo no.
-2: la crítica a los políticos de derechas no puede hacerse en los mismos términos que vosotros usais con normalidad. Que sí, que tú me dejas llamarlos como yo quiera, pero no veas.
Y mientras tanto a mí, un ministro del interior que, entre otras muchas cosas atroces, ha otorgado en varias ocasiones la cruz de plata de la guardia civil a una muñeca de cera gigante, me sigue pareciendo un imbécil, un gilipollas, un tonto a las 3, un soplacirios, un perturbado y no puedo entender con qué criterios objetivos se le puede defender cuando empieza a largar sus soplapolleces. La labor tan imprescindible e impecable (la mayoría de las ocasiones) que realiza este cuerpo militar debería exigir parar en seco estas patochadas. Esta performance ultra nacional católica nos sitúa 40 años en el pasado, dónde sin duda más a gusto se encuentra don Jorge.
Un saludo