Es lo que pasa por llevar un asunto político hacia el lado de la Justicia ... se pierde el control de la solución.
Si antes del 2012 el Gobierno central y la Generalitat se hubieran sentado a negociar una solución dialogada dentro del marco actual jurídico, hace años que no tendríamos la situación que tenemos en Cataluña y que no se resolverá por la vía Judicial.