La semana pasada acabé de ver la tercera temporada de Twin Peaks. Se trata de un producto marca David Lynch y por tanto no apto para todos los gustos.

La temporada consta de 18 capítulos de unos 50 minutos cada uno, aproximadamente. Lynch dispone de 15 ó 16 horas para contar su película, en las que por momentos se recrea en exceso ya que no tiene excesivas premuras de tiempo.

Ver de nuevo los actores de las temporadas antiguas tiene su encanto, aunque en esta temporada tienen, en general, un papel secundario. La esencia de la primera temporada de Twin Peaks se ha perdido, aunque la historia actual se la hace encajar por momentos con la antigua.

Es una temporada para verla más de una vez, si tienes la paciencia para ello. También puede resultar de ayuda antes del segundo visionado consultar una web que te guie en los detalles que debes fijarte.

Antes de ver esta temporada, por supuesto que hay que ver las dos anteriores, pero también es recomendable ver la película Twin Peaks: Fuego camina conmigo. Creo que el año pasado se estrenó otra película de Twin Peaks: La piezas perdidas, creada a partir de material no publicado. Yo esta no la he visto, pero es posible que también ayude en la comprensión de la temporada actual.

Para finalizar: Habrá gente que no podrá pasar de los primeros capítulos y gente que le gustará porque es un producto diferente. Entiendo a ambos colectivos.