Una miniserie de la BBC de 6 capítulos que están emitiendo en Movistar llamada "Sospechoso". Tiene todos los artificios posibles, los mecanismos de manipulación son tan manifiestos que resultan sorprendentes; miradas aviesas, secuencias basculantes, personajes que corren detrás de los guionistas por más contradicciones que tengan..., para cuando llegas al tercer capítulo (si todavía estás ahí) tienes más sospechosos que en la secuencia del entierro de Ghandi y te empiezas a sentir como un pollo de engorde con una sensación de que vas a explotar de un momento a otro.
Una de esas series en las que un guionista puede pasárselo bomba, no hay premisa lo suficientemente engañosa o ridícula cuando no tienes remordimientos. Me imagino las risas del grupo de escritores en una tarde de cubatas.
Lo mejor, el inspector y su ayudante. El primero aunque figure con otro nombre es el mismísimo Urkel ya talludito después de una indigestión de Colombo. Anda como un pato mareado y la gestualidad es realmente cómica. Su ayudante es una chica joven que le mira con cierta inquina, comprensible por que cada vez que están juntos se come algún marrón. Una pareja de inútiles que demuestran el daño irreparable que ha provocado el Brexit en la sociedad británica.
El espectador llega al último capítulo completamente rendido y es capaz de aceptar cualquier resolución con tal de concluir tal despropósito. Cuando apagas la tele comprendes el famoso dilema por el que cuando estás en una partida de cartas y no sabes quien es el primo es porque tú eres el primo.
Muy recomendable no verla.
Saludos