El doblaje español ha sido tradicionalmente muy bueno, eso es innegable, pero no nos anclemos en el pasado y reconozcamos que, entre que es un mundillo parecido al del teatro y la televisión, bastante cerrado donde hijos de, parejas de, amigos de,...entran más fácilmente que muchos mejor dotados, y que la cantidad de trabajo supera al número de actores de doblaje, cada vez es peor.
A eso se une que vale, las producciones de primera linea -Hollywood y poco más- se dejan una pasta en el tema, así como en publicidad,...pero habéis probado a ver pelis de Cameo o Manga Films (coreanas, brasileñas, etc)? Películas magníficas (algunas) pero que dobladas son simplemente un asco. A tomar viento la banda sonora, diálogos neutros, casi como los de un intérprete en tiempo real...ni os cuento el sonido envolvente, etc.
Además. suelen ser pelis de pocos efectos y acción y más interpretación, con lo cual se pierde ésta. Si es que no se puede, simplemente no se puede, doblar a un matón o drogata de las fabelas de Río, o a un Yakuza cuando se hace el Harakiri.
Tampoco se puede en el caso de un negrata de Harlem, pero ya nos la han metido tantas veces que ni nos damos cuenta. Y sin ir tan lejos, qué pasa con el exquisito acento británico, tan distinto al de un vaquero de Texas, a su vez distinto del de un puertorriqueño de NYC.
En fin, es darle vueltas a lo mismo por enésima vez: el cine en este país es el único arte en el que se potencia, financia su transformación antes de llegar al público, y éste encima no sólo la acepta sino que la defiende con la capa y la espada de la incultura y el desconocimiento absoluto de otras lenguas tan cercanas y algunas lejanas pero maravillosas.
Penoso. Grave. Más de lo que pensamos.
Como dicen en otro hilo por aquí: Así nos va. Nos venden la moto; rota; la compramos y encima le ponemos un tubarro bien gordo para que "pete" más.
La que me va a caer.![]()