Para los seguidores de la música alternativa latino americana dos joyas de difícil clasificación;



Plagado de vocablos para iniciados que aumentan el misterio de la mezcla (Machos sulibellados y soripellados, Pechos reververellantes, Cuerpos chúcaros que te dejan totalmente almerellado...). Una instrumentación entre la New Age y la música de fondo de Cuarto Milenio.

Irresistible.

Y el Coughar de Caracas nos pone a bailar chévere, chévere, chévere...



La letra no tiene desperdicio, con algunos versos magistrales (Quien ha visto matrimonio -
Sin correr amonestación) que aunque no sé lo que significa suena realmente feo y creo que sé por donde va .

Saludos