Las frecuencias agudas son las de mayor valor y, a efectos de lo que consideramos sonido agudo, serían desde 1 a 6 kHz.

Antes de modificar la ecualización a los altavoces, asegúrate que estan situados correctamente, que los frontales están dirigidos hacia tus hombros y tu posición/su posición está en un triángulo aproximadamente equilátero.

Luego, si los agudos no los percibes bien puedes empezar a aumentar los decibelios de ganancia (hasta +6 puedes hacerlo, lo que supone aumentar la intensidad en esa frecuencia un 200%), empezando por los frontales y central y el la frecuencia más alta (6 kHz) hasta +3 y sino es bastante hasta +6dB.

Si no es lo que buscas, aumenta las frecuencias siguientes, en escalera (p.e. +6db 6Khz, +4db 4Khz,....).