Por un aparato como este se puede pedir lo que se quiera (y al que le interese, que lo pague) porque es casi un aparato de culto. Hoy habrá aparatos con más chorradas y por menos precio, fabricados en China, con mucho plástico y materiales y componentes de dudosa calidad, pero un clásico como este no se va a volver a construir con esa calidad y dudo mucho que ninguno de los actuales tope de gama le iguale en calidad de sonido.