Tras una semana con los B6.2, como cambios significativos diría: más definición y separación en las distintas frecuencias, destacando los graves (los bose carecen a pesar del tamaño). Si es cierto que en algunas canciones donde se acentúan los agudos de trompeta, noto como una pequeña distorsión, la cual quiero pensar que es de la propia grabación más que de los altavoces o el amplificador.
También es verdad que no estoy acostumbrado a escuchar algo tan fidedigno o mas natural, aparte el tema de rodaje de los altavoces.