Si está entendido.
En mi caso es que nunca he querido sala dedicada, aunque oportunidad sí que tengo, pero prefiero mantenerlo como un espacio familiar polivalente que "secuestrarlo". Y el tema del proyector tampoco me ha llamado tanto desde que las pantallas ya superan las 60 pulgadas, aunque algo de gusanillo hay. Está claro que si te vas a sala dedicada con proyector y te va el cacharreo el gasto se puede disparar
Que no digo que algún día no cambie de idea y me meta en ese jardín, pero no está en mis planes.