Una de las mayores pegas de la primera versión de Kinect era su incapacidad para funcionar correctamente en condiciones de luminosidad baja, algo que lo hacía poco indicado para sesiones de juego nocturnas, o para quienes usaran un proyector en lugar de un televisor.

Afortunadamente, parece que la nueva versión que acompañará a Xbox One no solo permitirá jugar a oscuras, sino que además tendrá características innovadoras. Incluso aunque estemos jugando con la luz apagada, Kinect 2 reconocerá nuestra cara, realizando un mapeado 3D de nuestros rasgos con 1400 puntos clave, y además será capaz de leer los movimientos de nuestra boca para saber cuándo estamos hablando.

Anteriormente ya se confirmó que Kinect 2 no necesitará una gran distancia con el jugador, abriendo el abanico de uso a salones más pequeños, o incluso a su instalación en habitaciones, y que será capaz de detectar a varios jugadores simultáneamente sin perder comba de los movimientos de cada uno.

Las malas lenguas dicen que el tiempo de respuesta a nuestros movimientos todavía tiene cierto "lag" (retraso), y que en ese sentido sigue siendo una tecnología decepcionante frente a controles tradicionales como el mando, pero hasta que no lo probemos en directo, todo serán especulaciones.

¿Qué pensáis del nuevo Kinect? ¿Os parece un añadido importante de Xbox One, o por el contrario os parece un trasto innecesario?