La distancia de visionado que tienes es efectivamente corta, pero todo es cuestión de hacer pruebas a ver qué pantalla máxima tu cerebro admite ver.
Si vas de vez en cuando al cine, estira los brazos y mira cuánto tienes que separar las manos para abarcar la pantalla entera (se supone que en tu mejor punto de visión del cine, ni muy cerca ni muy lejos). Mides la distancia (para evitar demasiadas subjetividades) entre las manos, y repite en tu casa para recalcular el ángulo de separación de las manos, y desde el punto de visionado continúalo hasta la pared.
Así sabrás cuánta pantalla es capaz de ver tu cabeza con "comodidad". Si mayor de metro y medio en la base, vete a por un proyector. Si es menos, con un plasma tendrás una sensación maravillosa y un considerable ahorro de conexiones. Y además menos requisitos de oscuridad, etc.
Puedes buscarte un plasma hasta de 80", por buscar (en USA sobre todo). A dos metros yo no pondría menos de 65".