Con Ben Affleck me pasa como con Clint Eastwood, que como actor no me gustaba y como director (y en algunas películas como guionista) me encanta (aunque todavía lleva pocas películas hechas). Es como el jugador que es mediocre y como entrenador es bueno.
Así que como en esta película hace las dos cosas habrá que darle un voto de confianza y verla.