Pelìcula que nos transporta a un lugar que quizá nunca descubriríamos sin el film. Nos hace ver que existe más mundo aparte del “nuestro”, que verdaderamente hay personas al otro lado del planeta viviendo situaciones que nosotros, desde aquí, ni siquiera podemos llegar a imaginar. Sin embargo, la vigorosidad, las ganas y la alegría que viven los personajes a pesar de su situación nos harán pararnos a pensar en aquello que nos rodea. Magia y amor se unen en esta historia de una niña y su padre, y todo lo que viven en su Bañera.
Bien es verdad que muchos pueden alegar que Benh Zeitlin ha jugado con recursos fáciles (la niña, la enfermedad del padre, el abandono de la madre y la pérdida del hogar). Sin embargo, este film rompe con lo visto hasta ahora y abre el telón hacia un mundo en el que la felicidad de una niña reina sobre todo lo demás. Una apertura a un paraíso de fantasía e imaginación, ceñida por un marco donde la cruda realidad está presente. La historia de una niña y su padre, el cuento de La Bañera. Este film navega hacia el público llenando la sala de inocencia y magia. Sin duda alguna una de las mejores películas del año protagonizada por una actriz muy especial que llena el relato de ilusión. Una historia que nadie debería perderse y que nos ayudará a conocer la vida más allá de nuestras fronteras.