Yo tuve la Sony 42W828 (modelo por cierto muy recomendado en su rango de precios) y la tele era lenta como el caballo del malo. La encendías y como tuvieras la tele conectada al WIFI y con un disco duro o pen por USB, entre que se conectaba a internet y hacía un chequeo de la unidad de almacenamiento, tardaba la vida en responder al mando a distancia, por lo que durante 1 minuto te chupabas el programa o anuncio de turno que en ese momento estuvieran echando.
El smart TV, que no era Android, además de parco era igualmente lento. Sin embargo, netflix funcionaba bien y la replicación de pantalla con dispositivos móviles también.
Después he tenido una LG Serie 6 con WebOS. Un smart TV fantástico, pero igualmente al encender la tele tarda un rato en responder al mando, ya sea para cambiar de cadena o modificar el volumen. Y si intentas acceder a alguna app, directamente te sale un cartel de que no está disponible temporalmente. Cosas como conectar la tele a internet por cable en vez de por wifi y no tener pinchados discos duros o pen hacían que el tiempo de espera se redujese algo. Una vez pasados los primeros 30-40 segundos, y salvo momentos puntuales en los que el mando de ruleta se cuelga, la tele iba muy bien.
Ahora tengo una Samsung 55KS8000. Nada mas encender la tele, puedes cambiar la cadena, subir o bajar volumen o acceder al smart tv. En ese sentido es rapidísima.
Tras todo este rollo, dirás tu, ¿a mi que me importa las teles que has tenido?
Lo que quiero decir es que, habiendo pasado por varias marcas y diversos sistemas operativos, actualmente es casi seguro que compraré una Sony 65XE9005 si queda a buen precio en el BF. Por qué? Porque en ese tamaño, es la más competitiva relación calidad/precio. Y me da igual si al encenderla tengo que esperar un poco para que responda con agilidad a las ordenes que le de desde el mando a distancia. Lo que busco es la máxima calidad de imagen a un precio contenido, sabiendo las limitaciones que la tele pueda tener y el uso que yo le voy a dar.