Al hilo de lo que comentas, ayer estuve haciendo pruebas en el equipo principal desconectando y conectando los dos subs. Ahora mismo me resulta muy fácil apagar los subs, reajustar la EQ a los monitores sin cortar, y comparar. Es muy curioso escuchar cómo afectan al sonido general las frecuencias más graves en una comparación casi instantánea. Sigo insistiendo en que para disfrutar de la música no es necesario un sistema fullrange, y yo lo hago escuchando incluso a través de altavoces bluetooth muy pequeños, pero reconozco que la experiencia es más agradable y completa (lógicamente) si el sistema baja más (y mejor).
Lo que más me llamó la atención al desconectar los subs, aparte de dejar de escuchar cosas que con ellos sí escuchaba, es no sólo una falta de limpieza y contundencia en el extremo grave, sino un sonido general más anodino. Mi teoría es que, a nivel perceptual, el
contraste entre las frecuencias muy graves y las muy agudas hace que el sonido con subs resulte más rico. Y el cuerpo general del sonido es mucho mejor, quizás pasa un poco como el bajo en un grupo, no se nota que suena pero si tocan sin bajo se pierde toda la cohesión y el cuerpo.
Además, el grave profundo es muy agradable psicacústicamente, y hace la experiencia de escucha más agradable.
Me compré otros dos subs para el segundo equipo
