Hace algún tiempo fuí a ver esta nueva película de terror al cine y cuando salí del cine me pareció que era una nueva estafa del género, otra de esas películas de pseudo terror que no aportan nada nuevo. Aparte, los acompañantes que tuve en el día de su visionado comentaban lo mismo que yo en esos momentos.
De todas maneras, ahora estaba recordando la película y... vaya, pues no era tan mala como yo pensé en aquellos momentos. Hasta puedo atreverme a recomendarla. Tiene unos minutos en los que verdaderamente recuerdas esa tensión que tienen que aportar las películas del género y, por supuesto, no es del moderno terror adolescente, que es un punto a su favor.
Después de la reflexión, película de recomendable visionado si no tenéis nada nuevo que ver en la sala.
— Es usted un miserable y cobarde hijo de perra. Ha matado a un hombre desarmado.
— Pues debió haberse armado cuando decidió decorar su salón con mi amigo.