Los títulos deportivos son uno de los más fáciles de criticar; año tras año, vamos observando nuevas entregas de estos y, en ocasiones, nos da la impresión de gastarnos nuestro pecunio a cambio de obtener simplemente una actualización de las plantillas de los equipos. Parece que los muchachos de 2K Sports quieren romper con esta idea drásticamente, ofreciéndonos mucho más y haciendo que tengamos ganas de ganar el anillo cada año… Y este año, lo querrás ganar.
Bienvenidos a la mejor liga del mundo
La cara de Kobe al ver el balón nos indica su dependencia de él
Ya ha empezado. La NBA. Y este año, con más producto español que nunca. El título de 2K de la presente temporada, sin duda, no nos va a dejar indiferentes, ya que el proceso de enlucido, pulido, abrillantado y secado al sol vuelta y vuelta este año ha sido completo. Y ya que estamos en la mejor liga del mundo, bajo mi punto de vista, 2K ha realizado el mejor título de baloncesto de que dispondremos esta temporada.
Como ya apuntaba en su preview, apostillaremos brevemente que las plantillas han sido trasladadas de forma rigurosa a sus equivalentes electrónicos; suponemos que tendréis ganas de echarle mano a vuestros jugadores modelo. Pues los tenéis todos, y hay que apuntar que, en esta entrega, la tecnología de captura es excepcional, individualizando los movimientos característicos, sabiendo quién es quién simplemente viéndolo moverse, driblar o lanzar.
En su conjunto, el producto hará que sea una muy buena elección su adquisición, ya que opciones para mantenernos ocupados, probar, jugar, rejugar, practicar mates, participar en concursos de triples, echarnos un 21, iniciar una franquicia, jugar una temporada, hacernos unos play-off, en fin, que no nos dejará tiempo para el aburrimiento.
Número uno del Draft
Es lo que obtuvieron Chicago Bulls al elegir a Michael Jordan en el año 84, y eso que no fue el uno, sino el tres. NBA en estado puro. Y es lo que nos encontramos en 2K8. Los encuentros realmente van a exigir tu concentración y que des tú máximo de habilidad (siempre que, claro está, los adecues a tu nivel de pericia). Nos encontraremos con varios modos como ya hemos apuntado; los modos de partido en la calle, partido a 21, concurso de 3 puntos o de mates, que le dan un aire más informal para poder practicar desenfadadamente, sin la presión de las victorias de cara a la clasificación para play-off o ya de la lucha por el anillo. Personalmente, te produce más tensión el hecho de avanzar por toda una temporada, ya sea en el modo Temporada o Asociación, si bien los dos son buenos; yo, personalmente, prefiero el primero debido a que refleja los equipos tal cual son en sus contrapartidas de carne y hueso.
Jugada de 3. Mate y tiros libres
De todos modos, y gustos personales dejados a un lado, hay que reconocer que el modo conocido como “La Asociación” es estelar. En este modo habrá que asignar a los jugadores su papel en función de si son la estrella, titulares, novatos, sexto hombre o simplemente calientabanquillos que se disputan los minutos de la basura. Podremos fichar agentes libres y gestionar nuestra plantilla para establecer un equipo sólido y avanzar varias temporadas. Los factores de personalidad y moral de los jugadores también tendrán peso en la gestión del equipo, dotando a este modo de una profundidad excepcional. Añadiremos a esto los diferentes estilos de juego de cada equipo, que podremos moldear a nuestro gusto, pero vaya, los Spurs no van a hacer espectáculo por mucho que nos empeñemos a no ser que hagamos 10 traspasos. Eso no quiere decir que no puedan ganar la liga, que de hecho lo hicieron, simplemente, a nivel de brillantez y plasticidad no derrochan mucho (no fue por casualidad que la final de 2006 fue una de las menos vistas en la historia de la NBA).
Empieza la Regular Season
Este mes ha dado comienzo la regular season y, de forma simultánea, disponemos de NBA 2K8, para tener nuestra particular visión del baloncesto.
Entrando en harina, veamos qué nos ofrece en detalle.
Jugabilidad
Lo primero que nos ofrece es una innumerable cantidad de opciones en el juego exterior, para conseguir ventajas posicionales a base de driblar con el stick, así como en el juego interior. Es al mismo tiempo asequible para novatos y exprimible para los veteranos. Una delicia en cuanto a equilibrio jugable.
El juego sin balón nos permitirá mayor control para hacer alley-oops, pantallas, bloqueos y continuación, etc. Si tenemos problemas para seguir las jugadas del libro de jugadas, podremos activarlas para que, visualmente, veamos los caminos, movimientos de toda la jugada en sí que aparecerán en el mismo parquet. No creo que nadie quiera jugar con esta ayuda siempre, pero como aprendizaje puede venir bien a más de uno hasta que te familiarices con la dichosa jugada de bloqueo doble en el poste alto, sacar fuera la bola y, cuando te intentan cerrar, meter pase picado al poste bajo donde has dejado solito al base que salía del doble bloqueo del principio. ¿Suena bien, no? No será fácil, pero una vez lo cojamos, y para esto se entiende esta ayuda, la primera vez que nos salga, será muy gratificante.
Ridnour debe estar hasta la coronilla del pegajoso Fisher
Quizás el juego en el poste bajo se ha potenciado en exceso y es demasiado efectivo. Con una de las estrellas bajo tableros (Shaq, Duncan, Garnett,… ) puedes fácilmente dominar un partido. Esto podríamos considerarlo como uno de los errores menores que le podemos encontrar; pero pese a estos errores menores y detalles por pulir, es el MVP de las canchas de baloncesto sin duda alguna. El juego en conjunto es impresionante.
El indicador de cobertura telefónica, ¡huy!, perdón, el indicador de probabilidades de tiro también actuará en función del jugador que controlemos. Traducido, funcionará de modo que, si queremos tirar con Nowitzki, será mejor que lo dejes quieto y se la des en el sitio (entonces será como Billy el niño), mientras que con Kobe no habrá problema en primero hacerle un lío al defensor para luego, en salto desequilibrado hacia atrás o un lado, enchufarla. Habrá jugadores que podrán culminar una jugada ya sea tiro, bandeja o mate aunque se les echen tres tíos encima, como Lebron; otros, sin embargo, con ponerles la mano en la cara tendrán serios problemas para tocar aro. Con esto los chicos de 2K han conseguido individualizar los jugadores excelentemente, acercándolos a la vida real más de lo nunca visto; a Shaq lo dejaremos de espaldas a canasta, esperará despacito a que se la demos, hecho lo cual se dará la vuelta y, haya quien haya, pasará por encima y la meterá para abajo, haciéndolo cuando le dé la gana. ¿No os suena de algo?
De todos modos, a este indicador de tiro, bajo mi experiencia, no deberemos tenerlo siempre en cuenta. Habrá ocasiones en que si la posición de nuestro tirador es favorable, o si hemos conseguido dejarlo completamente solo, aunque esté en malas condiciones según su teléfono, si ejecutamos un lanzamiento decente, es muy probable que la clave; por el contrario, si estamos al máximo de probabilidades y queremos ser Juan Palomo, perdón, Allen Iverson (es como se dice Juan Palomo allí, y si no lo dicen, deberían decirlo), coger el balón y lanzarnos guisándonoslo y comiéndonoslo contra los 5 defensores, lo tendremos realmente complicado. Eso sí, si conjugamos un poco de cada cosa, pongamos por caso, Allen Iverson (¿o era Juan Palomo?), el cual tenemos a máximo rendimiento y encima le damos un pase que le de cierta ventaja, sumado a un lanzamiento aceptable mientras nuestro hombre virtual salta 2 metros hacia atrás en su particular mecánica de tiro, pues lo normal será que la enchufemos limpia. Vaya, como en la vida real. Aunque la vida real también nos dice que, si abusamos del estilo de Allen Palomo (¿o era Juan Iverson?), no ganaremos un anillo en nuestra vida.
Presionando el gatillo izquierdo podremos cerrar al jugador que lleve el balón. En principio nos permite un estrecho marcaje, y dependerá del nivel defensivo de nuestro jugador que lo haga mejor o peor. Nosotros deberemos dirigir más o menos al jugador, pero mientras mantengamos pulsado el gatillo izquierdo estaremos sobre él. Si tratamos de efectuar un robo, esta presión desaparecerá y deberemos volver a iniciarla. La única pega que podemos encontrar a esto es que un hombre grande y lento como Nowitzki con esta opción será capaz de cubrir con éxito a jugadores mucho más rápidos y pequeños, lo cual es uno de los errores de este sistema, lamentablemente.
En cuanto a la inteligencia artificial, veremos que es mucho más brillante en ataque que en defensa. Cuando la máquina te ataque, te hará sudar tinta, te buscará el hueco, se moverán sin balón para confundirte y aprovecharán cada posición de ventaja. Requerirá un fuerte esfuerzo defensivo evitar que te vayan anotando ataque tras ataque. Sin embargo, cuando sea la máquina quien defienda, podremos repetir una y otra vez una jugada (al poste a Garnett, triple de Nash o dribling tras bloqueo de Kobe y suspensión) y la defensa no reaccionará como debería, lo cual es uno de los pocos aspectos que hacen al título quedar a un pequeño paso de la mejor simulación jamás vista en un juego de baloncesto.
Para compensar estas pequeñeces, veremos cómo Steve Nash dará alguno de sus pases sin mirar, o Kobe Bryant se hará amo y señor del balón, chupará, se tirará hasta las zapatillas e intentará ganar el partido él solo. Viendo estas acciones, lo realmente conseguidas que están, no podemos sino pasar por alto los errores que hemos apuntado, viéndolo en conjunto.
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