Lo que sucede es que la señal grabada en los discos de vinilo está ecualizada, según la norma RIAA para música de un vinilo:
- para que la aguja no se desplace mucho en el surco por la vibración de las bajas frecuencias (dando distorsión) y para obtener más espacio (tiempo) de grabación se acordó disminuir la intensidad las frecuencias graves
- y para que la relación señal/ruido mejorase (aumentando la intensidad de la señal en las frecuencias de ruido del vinilo, estas se enmascaran), subir las frecuencias agudas
Bien, los amplificadores con entrada de phono, llevan integrado un sistema en el previo que se encarga de hacer el proceso de ecualización inverso, aumentando los graves y reduciendo los agudos, siguiendo la curva de ecualización inversa a la realizada antes de estampar el vinilo, como puedes ver aquí:
Por debajo de los 50 Hz el previo aumenta 6 dB por octava y a partir de los 2120 Hz disminuye 6 dB por octava, estando las frecuencias entre esas dos cifras no modificadas (corresponden a las frecuencias de la voz humana).
Añadidamente el aumento de intensidad de la señal es mayor que en las otras entradas de previo.
Por ello, si conectamos un tocadisco a otra entrada, lo oiremos muy bajo y distorsionado, con pocos graves y mucho agudo. Y si conectamos otro aparato al previo de phono aumentarán los graves y disminuiran los agudos de la señal original, que no estaba ecualizada, teniendo un voltaje de aumento probablemente excesivo.
Saludos